Este enero, ¿por qué no empezar el año con un frasco vacío e ir llenándolo con papelitos en los que anotemos todas las cosas buenas que nos vayan ocurriendo a lo largo del 2015?
El 31 de diciembre del año que viene, podremos vaciarlo y leer todas las cosas increibles y maravillosas que nos hayan sucedido a lo largo del año...
Es una buena forma de valorar el año con una mejor perspectiva, verdad?
2 comentarios:
Me ha gustado tu propuesta, me la apunto y quizás la ponga en marcha.
Besos
Aunque lo veo en Mayo lo empezare a hacer de ahora en mas. Gracias mi niña!
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